Dios
no ha comisionado a los ángeles, él ha delegado a su iglesia. Marcos 16:15 y
Mateo 28:19-20. Por
tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre
del Padre, y del Hijo Y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las
cosas que yo les he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días
hasta el fin del mundo” Mateo 28:19-20.
Debemos
observar con detalle la gran comisión según Mateo 28:19-20...
a) Lo
primero que el Señor resucitado con todo poder, gloria y autoridad nos dice:
“Id”. Palabra que se traduce del término griego “Poreuomai” que además
significa: atravesar, viajar, remover, andar, salir, subir. Son verbos todos
que implican una acción. Por tanto la iglesia de Jesús no puede ser pasiva, ni
caer en la comodidad.
b) La
segunda frase es: “Haced discípulos”. Expresión que se traduce del término
griego “madseteuo” que además quiere decir: convertir en alumno, aprendiz,
seguidor de la enseñanza. Es necesario que enseñemos a otros la verdad de
Jesucristo. Ocuparnos de que la otra persona aprenda lo que Jesús nos
enseña.
c) Proceso
que debe ser acompañado de oración o intercesión por aquella persona a quien le
estamos enseñando. Con amor y perseverancia debemos enseñar a otros, como Dios
nos enseña a nosotros.
d) Hoy
estamos aquí porque hubo personas que oraron por nuestra conversión, nos hablaron
de Cristo, nos invitaron a la iglesia o fueron a nuestra casa y nos enseñaron sobre
la Biblia. Hoy nuestro nombre está escrito en el libro de la vida porque
alguien un día se ocupó de nosotros.
Debemos
estar agradecidos con Dios por librarnos del infierno, agradecidos con Jesús
por dar su vida por nosotros. Es necesario también disponer nuestro corazón
para que otros sean salvos, y no vayan al lugar de condenación eterna.
No
podemos renunciar a nuestra oración por nuestra familia, amigos y vecinos, el
Señor hará su maravillosa obra en ellos así como la hizo en nosotros. Si el
Espíritu Santo permite que alguien se te acerque o tú al hablar con ellos ves
ese anhelo por la palabra de Dios es esa la oportunidad para que hagas
discípulos para Cristo.
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Muchas veces nos falta valentía para hablarle a los demás del Señor. Yo un día leí algo q me hace reflexionar decía algo como: si tuvieras un remedio efectivo contra el cáncer, ¿lo compartirías? Realmente tenemos un remedio infinitamente mejor, el remedio de salvación. Si las personas conocieran la Paz q proporciona tener al Señor en nuestras vidas, aceptarían el remedio sin pensarlo. Gloria a Dios!!
ResponderBorrarlos pastores debemos ser ejemplo para que la iglesia abance en la tarea misionera
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