Introducción: Está claro para nosotros que Dios es Todopoderoso y fiel, por tanto él cumple todo lo que ha prometido, pues nada hay difícil para él. Con frecuencia el enemigo lanza dudas y mentiras queriendo desanimar al cristiano, pero él es padre de toda mentira y cuando habla mentiras dice.
Dios es fiel, puro, santo y verdadero, por eso puedes descansar en su poder y fidelidad. Él hará como ha dicho…
El poder y la fidelidad de Dios.
La fidelidad y
poder de Dios implica nuestra preservación, 1 Corintios 10:13 y 2 Tesalonicenses 3:3
“No os ha
sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os
dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también
juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar”. “Pero fiel es el Señor, que os afirmará y
guardará del mal”.
Es muy interesante ver como
en estos versículos la fidelidad y poder de Dios están relacionados con
guardarnos de la tentación y del mal. En su fidelidad el Señor no permitirá que
llegue a nuestra vida una tentación mayor a la capacidad que él mismo nos da
para vencer, más bien nos guardará del mal.
Entonces la fidelidad y poder
de Dios no sólo la vemos en la provisión, como por ejemplo cuando les dio a los
israelitas por el desierto, agua, maná, codornices, etc, sino que su fidelidad
también es protección del diablo y de la propia naturaleza pecaminosa. Él nos
preserva del mal, como un padre que no quiere que su hijo sufra el dolor
consecuente de la maldad.
Creer en la fidelidad y poder de Dios nos hace
conscientes de su segunda venida. Hebreos 10:23-25
“Mantengamos
firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que
prometió. Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las
buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tiene por costumbre,
sino exhortándonos; y tanto más, cuando
veis que aquel día se acerca”.
El versículo 23 de Dios nos
dice: “Fiel es el que prometió” y esa seguridad en sus promesas se convierte en
una fortaleza o roca que permite al cristiano permanecer firme y perseverar sin
renunciar. Esa firmeza se hace evidente animándonos unos a otros, y haciendo lo
que es correcto delante de Dios, pues él cumplirá lo que ha prometido.
Entonces creer o no en la
fidelidad del Señor termina afectando el estilo de vida del cristiano. De hecho
aquel que cree en la fidelidad de Dios cree que Jesús volverá como lo ha dicho,
y por tanto es diligente congregándose, pues sabe que aquel día se acerca.
Entonces creer en la
fidelidad de Jesucristo se vuelve un asunto mucho más relevante aquí, pues
tiene que ver con la certeza de la salvación y de su segunda venida. Creer en
la fidelidad y poder de Dios va mucho más allá de pensar que él me dará la provisión,
es creer que él volverá.
Jesucristo es el Fiel y Verdadero.
La Biblia en Apocalipsis
19:11-13 nos recuerda que otro título de Jesús es “Fiel y Verdadero” (versículo
11 “Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo
montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea”).
Fiel porque es Aquel que no
miente, Fiel porque es digno de plena confianza, y Verdadero porque es sincero,
genuino, real, no imaginario. Él es el Fiel y Verdadero quien nunca engaña ni
decepciona, es Aquel que con todo poder y amor preserva tu vida del mal y de la
condenación eterna, y por cuanto él es fiel y cumple sus promesas, creemos firmemente
que volverá por su iglesia y establecerá su reino.
Conclusión: Dios es Todopoderoso y fiel, él cumple sus promesas y nos
preserva del mal para ser testigos de la realidad de lo prometido. Jesucristo
volverá como lo prometió, él no miente, por eso mantengamos nuestro corazón preparado
para su segunda venida.
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
Te invitamos a leer el sermón: "JESÚS DERROTÓ LA MUERTE".
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