Introducción: Cuando vemos la Biblia al detalle nos encontramos que Dios busca más disposición que preparación, ésta última viene en el proceso de hacer la voluntad del Señor.
Con frecuencia nos detenemos porque no tenemos los talentos, las capacidades o los recursos, pero debemos recordar que el poder es de Dios, y no hay nada imposible para él. Más bien vamos a su presencia para recibir de él la fuerza y el poder, y así avanzar hacia su propósito…
La presencia de Dios
restaura.
Nos dice Éxodo 3:4 “Viendo Jehová que él iba a ver, lo llamó Dios de en
medio de la zarza, y dijo: Moisés, Moisés. Y él respondió: Heme aquí”.
Es muy interesante
la frase: “Viendo Jehová que él iba a ver” pues nos permite concluir que el
Señor estaba muy pendiente de las acciones y pasos que Moisés daba, el Señor
estaba al tanto de él, y no sólo en aquel momento, sino en todo el tiempo que
estuvo en el desierto, cuando se casó, cuando tuvo sus dos hijos, cuando iba a
pastorear las ovejas de Jetro, etc. Dios está más pendiente de nosotros, que
nosotros de él.
Dios llama a Moisés
y él sensible a su voz responde: “Heme aquí”. Ante esa disposición el Señor le
da instrucciones en función de dos cosas: la tierra donde estaba y Aquel con
quien hablaba.
Nos sigue diciendo Éxodo
3:5 “Y dijo: No te acerques; quita tu calzado de tus pies, porque el lugar en
que tú estás, tierra santa es”.
El calzado de los
pies es figura de la vida que Moisés había llevado, por muchos años ha estado
lejos del propósito del Señor con él, pero ahora ha llegado el tiempo de Dios y
debe cambiar su caminar. Ya no va a huir más de Faraón y de Egipto, por el
contrario será ese el lugar de su victoria.
La presencia de
Dios santifica el lugar, es la presencia de Dios la que cambia las cosas, él
transforma nuestro caos en bendición, nuestro fracaso en victoria, cuando
pensamos que ya no hay posibilidad alguna, Dios hace milagros. A sus ochenta
años Moisés estaba retomando el propósito para el cual había sido creado.
Conclusión: A veces ante las dificultades o cuando el tiempo transcurre y no hay
respuesta del cielo, podemos concluir que ya no hay oportunidad, y que el
tiempo se acabó. Pero es Dios quien tiene la última palabra, él todo lo hace
bien y en el momento preciso. Ni edad, ni la incapacidad humana, ni los demás obstáculos
pueden detener los planes del Señor. Él es Dios Todopoderoso.
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
Te invitamos a leer el sermón: "HACER LA VOLUNTAD DE DIOS GENERA PROSPERIDAD".
Q bonito. Cómo siempre reconfortante y nos anima a seguir confiando en los planes De Dios y q no hay nada imposible para Él. Continuaremos Esperando en Dios.
ResponderBorrarMuchas gracias pastor por su dedicación.
Dios te bendiga Sara. Muchas gracias por tu reporte y apoyo.
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